Con un sistema de fuentes y servicios de información especializados en las ciencias de la salud, con referentes nacionales e internacionales, disponibles a través de la Red de redes, la Biblioteca Virtual en Salud de Cuba (BVS) alberga más de 460 libros digitalizados de autores cubanos, 55 títulos a texto completo de revistas médicas cubanas y 553 tesis doctorales.
Sin embargo, este nicho inacabable y continuamente actualizado —con un costo económico notorio—, no es aprovechado al máximo por estudiantes y profesionales de la Salud, la mayoría de las veces por desconocimiento o falta de práctica.
Para conocer un poco más las interioridades de esta BVS, el Diario de la Juventud Cubana conversó con el doctor Roberto Zayas Mujica, subdirector de Servicios Especiales de Información del Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas.
El doctor Roberto Mujica explicó que la BVS surge del Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas (creado el 26 de abril de 1965), para direccionar mejor el tratamiento de la información y la comunicación en Internet, y se distingue dentro del conjunto de recursos por obedecer a controles de calidad y metodologías comunes orientadas y coordinadas por el Centro Latinoamericano y del Caribe de Información en Ciencias de la Salud.
Por tanto, las fuentes de información (FI) constituyen un variado y rico recurso en la actualización de los profesionales y técnicos de la Salud, tanto en la investigación y la docencia como en la práctica asistencial.
Señaló que existe una gran variedad de especialidades y disciplinas relacionadas con las ciencias de la salud humana, por lo que se requiere de una amplia cobertura temática de las fuentes que se seleccionan para conformar la BVS, y que a la vez deben estar acordes con la política de salud del país y con los principios éticos de la comunidad de usuarios a quien va dirigida la información.
Dijo que tanto los profesores como los estudiantes deben formarse en la necesidad de interacción y actualización constante de información, y usar la BVS como el mecanismo más seguro y efectivo.
Aseguró que los más de 60 000 profesionales y toda la red de enseñanza, desde los centros asistenciales, tienen acceso a la BVS de manera gratuita.
Se trata de un repositorio donde la selección de las FI tiene un nivel científico avalado por diferentes indicadores que permiten que sean evaluadas por los controles de calidad, apuntó.
El doctor subrayó que esta es una tarea fundamental de la BVS, para que el usuario final obtenga una información más pertinente y adecuada a la satisfacción de sus necesidades.
Fuentes seguras
Continuamente al acceder a Internet, el usuario puede encontrar fuentes de información muy amplias, que en ocasiones lo atiborran de contenidos innecesarios y dejan de cumplir sus necesidades de conocimiento.
Así lo expresó el especialista, quien lleva años dedicado a la arquitectura de información en la gestión del conocimiento desde la BVS.
“La intención de nuestra biblioteca virtual es atender las necesidades de los usuarios y que los contenidos, estructura, presentación y accesibilidad agreguen valor al tiempo que el visitante dispone. De esta manera, los usuarios de diferentes niveles y ubicación pueden interactuar y navegar en el espacio de una o varias FI, en cualquier ubicación física en que estas se encuentren”, refirió.
Un requisito indispensable que se debe tener en cuenta, es el estudio sistemático que permita conocer las necesidades en la atención primaria, las instituciones de los niveles secundarios y terciarios, la docencia, los programas de salud, la situación de salud del país, las inquietudes de colectivos de usuarios, de grupos comunitarios con intereses específicos y de los gestores de salud, sin olvidar las nuevas tendencias mundiales en materia de salud-enfermedad, que permiten conocer nuevos intereses informativos.
—¿Cómo se estructura la BVS en la Red de redes?
—La BVS se conforma en un espacio virtual de Internet, con la colección de fuentes disponibles. Las FI se basan en un trabajo cooperativo y operan de manera descentralizada, bajo la responsabilidad y coordinación de una institución con la función de asegurar la integridad de los datos y la obediencia a las normas correspondientes. Para ello existe la Matriz de distribución de responsabilidades, indicando por cada una de las FI la institución coordinadora y las cooperantes en su mantenimiento.
«La arquitectura de la BVS tiene como objetivo asegurar que las fuentes de información producidas de modo descentralizado se conecten en red, para así maximizar su visibilidad y accesibilidad, y a la vez evitar la duplicación de trabajo».
—Internet puede ser un gran laberinto de información, en ocasiones no segura. ¿Cómo define la BVS la información para sus usuarios?
—Para esto las fuentes de información deben ser creadas, organizadas, estructuradas y alimentadas de acuerdo con metodologías compatibles que son desarrolladas en el contexto de la BVS, bajo la coordinación del Centro Latinoamericano y del Caribe de Información en Ciencias de la Salud.
«En la arquitectura de la BVS, la fuente de información es un recurso que responde a una demanda de información por los usuarios, incluyendo productos y servicios de información, personas o red de personas, programas de computadora».
—¿Cómo se inserta en la política de informatización de la sociedad?
—Se busca la integración de los esfuerzos nacionales para la selección, adquisición, procesamiento, recuperación y diseminación de la información científico-técnica que necesita el Sistema de Salud.
—¿Cómo lograr una información ampliada, actualizada y certera?
—Primero velamos por la calidad de las fuentes y servicios de información disponibles y la responsabilidad institucional. La BVS aplica criterios de calidad para la selección de las fuentes y servicios de información en salud que la integran, así como para la promoción de recursos nacionales e internacionales de acceso abierto disponibles en Internet.
«Para garantizar esos contenidos se destinan cuantiosos recursos económicos, que nos permiten costear la gestión de conocimiento de primera mano, de las editoriales y redes más reconocidas en el tema a nivel internacional.
«Un costo total de inversión de más de 455 000 dólares, nos permite contar con editoriales a las que se les contrata recursos de información biomédica para la BVS».
—¿Cuáles son los principales problemas que les golpean?
—Aún tenemos muchas dificultades, especialmente en cuanto a tecnologías. La BVS debe garantizar el acceso a los profesionales, docentes, investigadores, técnicos y estudiantes de la Salud en Cuba, a la información científica y técnica en Ciencias de la Salud disponible a través de la red de salud cubana.
Es importante —apuntó— desarrollar las iniciativas locales, institucionales y temáticas para promover y facilitar el acceso a la información científica y técnica en Salud, articuladas con el desarrollo estratégico de la BVS Cuba, a fin de lograr la integración del trabajo y consolidar el funcionamiento en Red del Sistema Nacional de Información en Ciencias de la Salud.
Para ello se prioriza el fortalecimiento de la Biblioteca Virtual como la red de fuentes y servicios de información que garantizan el acceso a la información científica nacional e internacional.
Acceso abierto a la información
Uno de los principios de la BVS Cuba es respaldar con información científica los principales problemas de salud del país y, en un sentido más amplio, las prioridades de la salud para la colaboración con otros países.
En este sentido, explicó el doctor Zayas Mujica que la cobertura temática de la BVS debe estar asociada a las prioridades de trabajo de los profesionales y técnicos de la Salud en Cuba, y la formación de recursos humanos, priorizando el respaldo informativo para estos.
El investigador aclaró que la BVS promueve el acceso abierto a la información científica y garantiza la consulta de los textos completos de la publicación científica que la integra.
La intención —aseguró— es el desarrollo de capacidades en competencias informacionales para la operación de fuentes de información y promover la ampliación y fortalecimiento del flujo de conocimiento en ciencias de la salud en la región.
A modo de resumen, indicó que el trabajo en red de la BVS defiende la construcción dinámica de fuentes descentralizadas, a partir de las cuales es posible recuperar información y conocimientos relevantes, confiables y actualizados.
Fuente: Diario de la Juventud Cubana